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miércoles, 5 de mayo de 2010

HOY DÍA 6 RINCÓN DE MATÍAS

LA NOCHE MÁS OSCURA.

Durante los últimos años, Geoff Johns se ha convertido en la piedra angular sobre la que se cimienta el actual Universo DC y en responsable de devolver el interés del público sobre personajes como Superman o Green Lantern.
Y es en las aventuras de Hal Jordan y el resto de los GL donde ha dado rienda suelta a toda su imaginación, creando una serie de sagas cósmicas que rivalizarían con las de Jim Starlin en sus mejores tiempos, partiendo tan solo de un relato corto que Alan Moore escribiera hace años.
El último y esperado capítulo hasta la fecha es Blackest Night, la Noche Oscura que fuese profetizada tiempo atrás y que cambiará para siempre el destino del Universo. La Muerte campa a sus anchas y los caídos regresan para incrementar sus filas mermando las de los distintos cuerpos de Linternas que Johns ha ido creando en este tiempo a partir de los distintos espectros emocionales. Un relato terrorífico y emocionante a partes iguales.


Como sucede con cierta frecuencia en el mundo del cómic-book, de manera prácticamente simultánea a la publicación de Blackest Night, en Marvel han sacado una saga circunscrita a los títulos mutantes llamada X-Necrosha que tiene grandes similitudes aparentes con la historia de Johns. Pero eso es algo que comentaré en la propia reseña de dicha saga.
A pesar de la enorme calidad y planificación que tiene Blackest Night, han surgido una serie de inconvenientes que personalmente hacen que mi valoración general de la obra haya bajado bastante. El más importante es que la trama no solo se narra en una limited series y en títulos en principios relacionados como Green Lantern o Green Lantern Corps tal como sucediera con el capitulo anterior. En este caso y debido a presiones editoriales, existen muchos crossovers que involucran a la práctica totalidad de títulos DC, siendo en la mayoría de los casos muy flojos, innecesarios o restan fuerza a la trama principal narrada en ocho números, volviéndola totalmente irregular.

En definitiva, un cómic necesario para entender el devenir de la línea de Héroes DC, pero que sinceramente y a grandes rasgos, no ha sido tan bueno como lo esperaba dados los magníficos precedentes. Eso sí, con uno de los más emocionantes y épicos finales del genero en muchísimo tiempo.


MATÍAS GONZÁLEZ ALARCÓN

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